Que los zapatos sean caros es bastante relativo.
¿Hasta cuánto estás dispuesto a pagar por unos zapatos? ¿20 euros? ¿12? ¿2 euros? (Los hay en Domti) ¿90? ¿170? ¿400? ¿3.300 euros?
Ya has pensado un precio. Ahora ten en cuenta lo siguiente:
1. Ningún elemento que llevas puesto sufre tanto maltrato como los zapatos:
- soportan tu peso
- te aíslan de las irregularidades del suelo
- te protegen del rozamiento en las pisadas
- te aíslan de temperaturas extremas
- amortiguan el impacto cuando pisas
- se amoldan a las deformidades particulares de los pies
- se acoplan a los apoyos irregulares, pronadores (apoyas la cara interior del pie) o supinadores (apoyas la cara exterior del pie).
- soportan esfuerzo de cizallamiento en los tacones
2. Funcionalmente, un diseño bueno te ayuda a avanzar en cada pisada gracias a la curvatura de la suela en la punta, se ajusta a tu pie, te da estabilidad. Estéticamente, los zapatos son obras de arte. Un par de zapatos puede arruinar una vestimenta magnífica o puede realzar de forma espectacular una indumentaria mediocre.
3. Hipocresía. Todos nos ponemos las manos en la cabeza cuando vemos las inmensas fábricas llenas de obreros chinos o paquistaníes trabajando como locos, pero a la hora de comprar: «Ay, qué caro. Yo quiero barato». ¿¿¿Quéééééé??? A ver si te aclaras, ¿qué quieres? Porque apuros económicos quien más y quien menos hemos pasado todos y uno se acopla a lo que tiene. Lo que no es congruente es gastarte al mes 100 euros cenando por ahí y haciéndote cervezas y después pasar por un escaparate con zapatos a 110 euros y alejarte despotricando del precio. Ojo, que cada uno con su dinero y sus placeres hace lo que le viene en gana. Pero, congruencia, que lo que te entra por la boca te sale por el pipi y unos zapatos buenos te van a aguantar más de una temporada, aún con el maltrato que le vas a proporcionar.
4. Fabricado en España. Sí, la calidad española es muy alta. Los zapatos españoles son de los mejores del mundo, según Stuart Weitzman, nadie fabrica mejor los zapatos que los españoles. (Te invito a leer su artículo, es muy interesante).
Realmente, ¿qué significa el Made in Spain? Unos zapatos hechos en china en un 99%, que llegan a un taller español donde los rematan poniéndoles la plantilla, o la tapa del tacón, ya llevan la etiqueta «Hecho en España». Y es mentira. Un par de zapatos pasa por un largo proceso de fabricación, muchos profesionales y máquinas diferentes, muchos elementos, muchos controles. España es garantía de trabajo bien hecho. China, no (generalizando y hasta la fecha presente). He tenido en mis manos unas botas sin estrenar que se han desgarrado al meter el pie; la piel parecía cartón, irreparables. La marca de las botas, española afincada en Elche, con base de producción en China y la etiqueta Hecho en España. Mal. Legal, pero mal. Es un engaño a los clientes, y es más un echar piedras contra nuestro propio tejado. Un descrédito a la afamada calidad española de calzado y una puñalada trapera a todos los profesionales españoles que trabajan exquisitamente en el sector, cuidando cada material y cada ínfimo detalle de ejecución.
Dicho lo cual, y como usuaria de tacones de diario (no en ocasiones especiales), que por el uso he acabado rompiendo cambrillones (hierro que mantiene la rigidez de la planta del zapato), te puedo asegurar que unos zapatos de 120 euros son una excelente compra.
Si me vas a decir que una vez te compraste unos rebajados a 100 euros y te dolían y otros de 8 euros te iban como un guante, lo acepto. Aunque me gustaría ver de qué tipo de zapato estamos hablando. Compruébalo por ti mismo: para chicas, al menos en zapatos elegantes, sean o no de altura importante, no te cortes ni escatimes en precio; y para hombres, igualmente, el estilo y la resistencia se pagan.
Los zapatos son arte, son una proyección de tu carácter y son los que te soportan y maltratas. Cuando compras zapatos no se trata de una compra cualquiera, es una inversión de arte en zapatos; excepto que no la vas a colgar en la pared, te la vas a llevar puesta, la vas a lucir, vas a sentir el poder que emanan.
Dales la importancia y date el gusto que te mereces.
Yo soy Gema Vicedo y Ella es Gabriel.
uuff , pues va ser que tienes razón….. pero…. bueno ni peros ni nada tienes razón, yo personalmente tengo un montón de problemas con el tema me duelen los pies… no encuentro zapatos con el diseño de mi cabeza nunca o casi nunca y cuando los logro encontrar pues claro valen 80 euros o así (siii ya se que no llegan ni a 100) y digo joerr bueno va voy a seguir buscando , y así estoy yo hoy 23 de junio con unas solas sandalias que no me matan, con varios zapatos en mi cabeza y sin zapatos nuevos por que claro esa es otra es que no quiero unos solo quiero varios!!!! gggrrr
Jajajajaja, ¡vivan los zapatos y viva nosotras! Qué caray, que nos los merecemos y nunca son suficientes. Date el gusto y no sientas remordimientos. Lo valen y lo vales, y más aún si tienes los pies delicados. Así que te los compras y cuando salgas con la caja y 80 euros menos en la cuenta, ponte a reír por el atrevimiento cometido. El dinero igual que viene se va, si no es en zapatos será en otra cosa, seguro más efímera y menos lucidora y poderosa que tu par de zapatos nuevos. Venga, disfrútalos, diosa.