Por qué llevar tacones, buena pregunta.
Ni para parecer más alta, ni para parecer alguien que no eres. Los tacones son una extensión de tu poder.
Tú puedes ser deportista, o puedes no ser deportista pero calzar igualmente zapatillas de deporte por la calle. A veces oigo gente que me dice, qué tacones, ni que te fueras a una boda. Yo podría decir, qué deportivas, ni que te fueras a las Olimpiadas. O botas planas, ni que te fueras a la guerra.
Nos acostumbramos a encasillarlo todo. Cada cosa en su lugar, cada zapato en su sitio. ¿Quién te ha dicho que el lugar de los tacones son las bodas? Todos los días de tu vida son especiales si tú haces que sean especiales. Suena a frase motivadora y superchachi pero no lo es, es la verdad, y lo sé porque yo la aplico. Yo me pongo los zapatos de la boda cuando me apetece, no cuando se supone que me los tengo que poner. A lo mejor porque mi mente está distorsionada de la tendencia social, no lo discuto, pero no importa porque cada día siento el poder cada vez que me los pongo para ir al mercado con el carro de la compra, para ir al colegio, a casa de mi hermana, a la calle a comer chocolate y mirar las reacciones de la gente, a visitar proveedores, a tirar la basura o a comprarme libros o donar sangre.
¿Quién te ha dicho que los tacones son para el sábado por la tarde-noche? ¿Sólo? ¿En serio centras tu vida a una tarde-noche a la semana? La vida es todos los días, desde que saltas de la cama, desde el lunes (mi día favorito, por cierto). Es tristísimo concentrar la ilusión en sólo un momento de la semana.
Haz de tu vida una fiesta constante y que dure para muy largo. No te guardes tu ropa especial para el sábado exclusivamente, y menos tus zapatos especiales. Sáltate las normas autoimpuestas por temor a lo que puedan pensar de ti.
«Qué escándalo, mira esa, sandalias con calcetines». ¡Síííííí! Jajajaja, adoro las sandalias y me las pongo en invierno. ¿Cómo crees que me voy a esperar nueve meses a que venga el buen tiempo? Amo los calcetines largos, lisos, estampados, gruesos, finos. Me encantan y los utilizo y los enseño en invierno con mis sandalias «de verano». Porque los calcetines en verano dan calor pero las sandalias con calcetines en invierno son perfectas. ¿Me salgo de la norma? Claro que me salgo de la norma. Entiendo que te puede parecer excéntrico pero viene con mi naturaleza (te aseguro que no parezco una guiri jajaja). Sin embargo no me hagas caso a mí, solo busca cuál es tu naturaleza. ¿Cuál es tu manera de ser? La tuya particular. Yo nunca voy a hablar de moda porque no me importa lo que se dicte, es más, no soporto que me digan lo que tengo que hacer y menos lo que me tengo que poner. Lo que me importa es que te escuches. Tanto si a ti te gusta ir a la moda como si no, vive tu plenitud interior todos los días, sácala hacia fuera con tu forma de vestir, con tus zapatos. Tu esencia especial, tu carácter único.
Como te puedes dar cuenta, el calzado cambia radicalmente la estética de lo que llevas puesto. Porque no importa que lleves un vestido de noche, tu calzado puede arruinar el glamour del traje en un segundo. Y no importa que lleves unos pantalones feos, que los hay a patadas. Tus zapatos van a dar un giro de 180 º a tu vestimenta. Por ejemplo, yo rescaté unos pantalones bombachos que mi amiga iba a tirar a la basura, marrones, horribles para ella pero amor a primera vista para mí. Me los pongo con unos tacones finísimos y soy la reina porque me siento la reina. Y lo mejor de todo, la expresión de espanto de la gente cuando me ve por la calle. Mezcla de horror y de admiración. Yo creo que es más una especie de: si yo me atreviera también me lo pondría. Y es absolutamente genial.
Los tacones son una extensión de tu poder. Y tú, amigueta, tienes un poder inmenso, infinito, desde el día que naciste, irradias luz y poder. Camina elegante y márcate en cada paso; que se note que aquí estás tú.
Ni la falda más corta, ni los pantalones más anchos, ni las botas más militares te van a hacer sentir tanto poder como unos tacones, sin importar lo que lleves puesto. Haz la prueba y me cuentas.
Para finalizar, mi más absoluto agradecimiento por leerte este artículo. Es un honor para mí esta visita tuya. : )
Yo soy Gema Vicedo y Ella es Gabriel.
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